lunes, 7 de enero de 2008

La lección más dura



Y se fue mi Bambanyi...con él aprendí muchas cosas de Zambia, pero hoy me ha dado la lección más dura...hace tres meses que volví y todo sigue pasando..., claro, no iba a pararse el tiempo. Yvonne y Manuel seguirán levantándose cada mañana diciendo: -Buenos días mi amoorrrr y desayunando en el baño. Gonzalo se irá pronto a la oficina a repartir ordenadores o lecciones de las nuevas tecnologías y Teresa hará sus mil y una labores de todo tipo...la vida en el orfanato continuará con las mismas rutinas y mis niños y niñas seguirán por allí correteando. Pero falta uno, uno más de esas estadísticas que tanto oímos sordamente desde este lado del mundo, pero ese uno yo lo tuve en brazos y se agarraba a mi fuerte cuando me iba, porq quería q lo siguiera levantando. Se va uno más porq no hay dinnero, ganas o lo que sea...pero el caso es que Bambanyi ya no está aqui ...ni allí...ni en ninguna parte. Que raro suena verdad? q triste, q pena...no soy capaz de escribirle unas líneas de despedida como quería porq no me salen las palabras...sólo sé que quedará para siempre en mi corazón, aq suene meloso, que estará en mi memoria porq existió conmigo por lo menos un mes, el que estuve en Zambia y ojalá ese mes tampoco se me olvide nunca porq mi familia y mis niños y niñas zambianos me cambiaron la vida. Adios Bambanyi...